Descripcion de Edimburgo

La antigua capital de escocia fue uno de los lugares con menores ataques al inicio den Unreich, por lo que alguna población logró atrincherarse allí y sobrevivir a las oleadas de criaturas oscuras que los atacaron. El sol y los pocos lugares para ocultarse, así como un destacamento de Hellsing que allí se había atrincherado, convirtió el lugar en una especie de santuario en el que se podía permanecer, hasta que el hambre comenzó a atacar a la gente, fue cuando el lobo disfrazado de oveja llegó.

La ciudad estaba muy dañada pero la mayoría de sus estructuras importantes se mantuvieron en pie. No fueron esos modernos y sofisticados edificios los que soportaron los ataques y las guerras, sino los castillos, las torres, los arcos, las iglesias, las estructuras góticas en si, como si los crucifijos hubieran protegido a aquellos lugares de la maldad. Ahora no queda ni uno solo de aquellos crucifijos. Cuando Adrian se instaló en el lugar comenzó a construir un buen establo para su rebaño. Tenía mano de obra y algunos recursos, y pronto la ciudad se levantó de la ruina para convertirse en una extraña y aterradora sucesión de edificios altos y comprimidos que eran casas o pequeños locales donde el trueque y el comercio comenzaron a levantarse. Los hombres animan a otros a ir a su ciudad ya que la idea de “reconstruir su hogar” los mantiene como al ganado, en un estado de felicidad e inconciencia sin saber el peligro que pende sobre ellos.

En este sitio pueden encontrarse algunas posadas, tiendas e incluso un par de bares, hay gente que se ha instalado con generadores a los que se le tiene que pedalear y se consigue energía eléctrica para aparatos pequeños. Su modo de vida es el trueque, respetan las leyes del que consideran su salvador.

[NPC’s]

• Ninguno en especial.
  

[LEYES]

1. No mataras, bajo pena de muerte
   
2. No acapararas bajo pena de perder todo lo tuyo
   
3. No te acercaras al castillo sin permiso
   
4. No robaras
   
5. No saldras de casa a cierta hora de la noche
   
6. Respetaras a los guardias que te protegen